Osteocondrosis de la región torácica: síntomas, tratamiento y prevención.

La osteocondrosis torácica es una enfermedad difícil de diagnosticar. Es menos común que las lesiones cervicales y lumbosacras porque las vértebras torácicas están inactivas. Debido a la proximidad de órganos internos importantes a la columna vertebral, no siempre es posible hacer un diagnóstico preciso de inmediato: según los síntomas, las enfermedades graves del corazón, los vasos grandes, los pulmones están cerca de la osteocondrosis, y viceversa: osteocondrosis Puede manifestarse igual que los síntomas pulmonares o cardíacos.

El dolor puede ser de cintura, irradiar (dar) a los hombros, debajo de los omóplatos en forma de lumbalgia, intensificarse con una respiración profunda. Posible dolor en la región torácica, que se manifiesta por una postura incómoda, inclinación del cuerpo. El dolor en el pecho izquierdo se asemeja a un ataque cardíaco, y en el hipocondrio derecho, colecistitis. Los músculos paravertebrales suelen estar tensos, hay frecuentes quejas de entumecimiento, escalofríos progresivos en el pecho, abdomen y brazos.

El canal espinal en la región torácica es bastante estrecho, por lo que incluso las pequeñas hernias o protuberancias formadas en la osteocondrosis pueden comprimir la médula espinal. Todo esto altera la calidad de vida, afecta el desempeño, la esfera emocional.

El tratamiento de la osteocondrosis mamaria debe ser oportuno y competente para prevenir la progresión de la enfermedad y el desarrollo de complicaciones. Debe saber que es imposible curar completamente la osteocondrosis torácica. Pero es muy posible asegurarse de que la enfermedad le dé a una persona un mínimo de problemas. Es importante cambiar su estilo de vida, introducir nuevos hábitos, actividad física practicable, seguir los consejos de tratamiento. Y luego la osteocondrosis no se hará sentir.

Factores de riesgo para el desarrollo de osteocondrosis mamaria.

  • Estilo de vida sedentario. La osteocondrosis afecta a personas con trabajo sedentario, postura forzada del cuerpo en el lugar de trabajo, por ejemplo, en la mesa de la computadora, una máquina de coser, personas que no reconocen la actividad física. Los músculos que sostienen la columna están hipotrofiados y la carga estática aumenta.
  • Exceso de peso. Cuanto mayor sea el peso, mayor será la carga en cada vértebra.
  • Fumar. Este mal hábito conduce a la interrupción del suministro de sangre a los tejidos, incluidos los vertebrados.
  • Actividad física excesiva y mal dosificada. Esto incluye levantar y cargar pesas con frecuencia, saltar y correr.
  • Trastornos de la postura, escoliosis. Estas enfermedades de la columna conducen a cambios degenerativos en los discos, tensión muscular.

Tratamiento de la osteocondrosis torácica.

ejercicios terapéuticos para la osteocondrosis torácica
  1. Terapia farmacológica:
    • Medicamentos antiinflamatorios: alivian el dolor y la hinchazón de los tejidos blandos. Las formas locales en forma de geles, ungüentos, cremas pueden ser útiles para la neuralgia intercostal;
    • anestésicos: inyectados por vía paravertebral para bloquear el dolor y aliviar los espasmos musculares;
    • glucocorticosteroides: estos medicamentos hormonales se usan en forma de bloqueos paravertebrales cuando otros medicamentos son ineficaces;
    • relajantes musculares: alivian los espasmos musculares dolorosos;
    • antidepresivos: ayudan a aliviar el estrés psicoemocional inherente a la osteocondrosis;
    • Vitaminas B: nutren las formaciones nerviosas, combatiendo así los trastornos neurológicos. En el tratamiento de la osteocondrosis, se utilizan preparaciones que contienen vitaminas B1, B6 y B12;
    • condroprotector: pueden suspender de alguna manera el proceso de destrucción de los discos intervertebrales y mejorar el metabolismo óseo. Es mejor inyectarlos directamente en los tejidos paravertebrales, porque los medicamentos orales deben beberse durante mucho tiempo y en dosis altas.
  2. Fisioterapia. Los métodos de fisioterapia actúan localmente sobre el foco de la enfermedad: alivian el dolor, los espasmos, mejoran la circulación sanguínea y la nutrición de los tejidos. En caso de osteocondrosis torácica, el médico puede prescribir magnetoterapia, electroforesis, UHF, terapia con láser.
  3. Masaje. Se realiza masaje en el área del cuello, región torácica, manos. En caso de exacerbación, se recomienda comenzar el masaje no desde el primer día, y hacerlo con moderación al principio. Es necesario lograr la relajación de los músculos espasmódicos. Durante el período en el que no hay dolor, la técnica del masaje se vuelve diferente, las técnicas son más intensas. Además de lo habitual, puede realizar efectos de puntada. En caso de osteocondrosis torácica, son útiles el masaje manual y al vacío y el masaje vibratorio. Estos tipos se pueden combinar o alternar.
  4. Fisioterapia. La realización diaria de ejercicios terapéuticos especiales ayudará a prevenir o reducir la frecuencia de las exacerbaciones de la osteocondrosis mamaria. Por ejemplo, puede realizar los siguientes ejercicios:
    • mientras está sentado en una silla, coloque las manos detrás de la cabeza e inhale, luego junte los omóplatos, tocando el respaldo de la silla (exhale). Repita de 10 a 15 veces;
    • Ponte a cuatro patas y arquea lentamente la espalda, como un gato, permanece en esta posición durante unos segundos. Luego doble la espalda y permanezca en esta posición también. Repita de 15 a 20 veces;
    • en decúbito supino, levante la cabeza y los brazos estirados a lo largo del cuerpo en la parte superior, manténgalos así durante unos segundos, vuelva a la posición inicial. Repita de 7 a 10 veces;
    • acostado boca arriba, levante las piernas rectas a una altura de 20-30 cm, mantenga la posición durante 15-20 segundos. Repita 10 veces;
  5. Aliviar la columna vertebral. Se realiza sobre una camilla especial, camilla de masajes con rodillos. También es posible la tracción submarina. Los tejidos blandos se estiran, al mismo tiempo que se descargan los discos intervertebrales.
  6. Relajación post-isométrica. Lo realiza un masajista o un terapeuta de rehabilitación que esté familiarizado con esta técnica. El método le permite relajar los músculos espasmódicos de la espalda.
  7. Acupuntura. Ayuda a aliviar los espasmos musculares y reduce el dolor.
  8. Hirudoterapia. Con la ayuda de sustancias biológicamente activas secretadas por la sanguijuela, el flujo sanguíneo mejora, el síndrome de dolor disminuye y se detiene la inflamación de los tejidos blandos.

Qué puede hacer usted mismo para la prevención y el tratamiento de la osteocondrosis torácica

  1. Trate de evitar las poses estáticas. Si está sentado frente a su computadora o máquina de trabajo, tómese un descanso con un calentamiento cada hora y media. Estírate, haz ejercicios de respiración, inclina la cabeza hacia adelante, hacia atrás, hacia un lado, balancea los brazos, dobla el torso. La silla de trabajo debe tener un respaldo cómodo que siga las curvas de la columna. Puedes ponerle una almohada ortopédica especial. El asiento debe ser sólido y la altura de la silla debe ser igual a la longitud de la parte inferior de la pierna. Hay requisitos para la mesa: el tablero de la mesa está normalmente al nivel del codo del brazo doblado.
  2. Es recomendable dormir sobre un colchón ortopédico para respetar las curvas naturales de la columna.
  3. No se recomienda llevar pesos excesivos, pero si es necesario, agacharse o arrodillarse para levantar el peso del suelo. Lleva la prenda con la espalda recta, distribuyéndola uniformemente en ambas manos.
  4. Con la osteocondrosis, es necesario mantener el peso corporal, comer menos alimentos fritos y grasos, excluir las bebidas carbonatadas y el alcohol.
  5. Los deportes como la natación y el esquí son muy útiles. Hacer ejercicio regularmente.

El curso de tratamiento óptimo para la osteocondrosis torácica debe incluir varios métodos que se complementen entre sí. El programa de tratamiento se forma individualmente. Es importante aliviar el dolor, mejorar la nutrición de los tejidos, aliviar los discos intervertebrales, relajar los músculos espasmódicos y fortalecer el corsé muscular. Para estos fines, la terapia debe realizarse de manera repetida, y al menos dos veces al año, complementada con ejercicios terapéuticos diarios, natación sistemática y tratamientos de spa.

A que medico contactar

Si aparecen síntomas de osteocondrosis mamaria, debe consultar a un neurólogo. Por lo general, si es necesario, también se prescribe un examen por parte de un neurocirujano: un terapeuta, un cardiólogo, un reumatólogo, un neumólogo para excluir enfermedades concomitantes. Los métodos físicos son importantes en el tratamiento de la enfermedad, por lo que será útil consultar a un nutricionista, especialista en fisioterapia, fisioterapia y masajes.